1.Carta del director
La refinería "Gibraltar-San Roque" ofrece, a través de su declaración medioambiental, un balance de la gestión ambiental realizada durante el año 2008. Este documento plasma el sentir de la instalación industrial en búsqueda permanente de la mejora continua y de una gestión sostenible de los recursos.
En CEPSA queremos favorecer una buena convivencia de la actividad con el entorno. Creemos que es fundamental mantener el equilibrio entre las necesidades energéticas y el compromiso de no perturbar el medio.
Asumimos que el desarrollo depende de la administración racional de los recursos materiales y que la protección del Medio Ambiente es una necesidad, no una opción.
El año 2008 ha supuesto para la refinería "Gibraltar-San Roque" el aumento de la capacidad productiva de la instalación, que se refleja en los 11,9 millones de toneladas procesadas durante ese año. Estos incrementos de los niveles de producción han ido de la mano de una concienciación creciente en materia ambiental.
Tras la consecución de la Autorización Ambiental Integrada (AAI) a finales de 2007, la Refinería ha seguido su ritmo inversor en esta materia y ha implantado las medidas y requerimientos de la AAI. La finalización del primer acuerdo voluntario ha sentado las bases del siguiente, cuya formalización se plasmará en el año 2009.
Además, se ha producido una reorientación del centro hacia la prevención y reducción de la contaminación, fijándonos nosotros mismos objetivos todavía más exigentes que los establecidos por la legislación vigente.
En los últimos diez años hemos logrado reducir un 80% los niveles de emisiones de dióxido de azufre a la atmósfera. Y, en este año 2008, un hecho manifiesto ha sido la consolidación del protocolo de actuaciones ante el riesgo de superación de los valores límites de inmisión de SO2, lo que ha supuesto que no haya ocurrido ni un solo incumplimiento en todo el año.
También debo destacar la bajada del contenido de azufre en los carburantes que ponemos en el mercado, con el fin de respetar las cada vez mayores exigencias europeas. Como muestra de esto, en los últimos diez años hemos logrado reducir un 80% los niveles de emisiones de dióxido de azufre.
Todos estos avances no serían posibles sin cada una de las personas que integran la Refinería. Profesionales cuyos valores máximos se basan en la integración de la seguridad en todas las operaciones, la prevención de riesgos, la protección ambiental y la calidad. Valores apoyados por la inversión continua de la Compañía.
Los consumidores finales de nuestros productos y servicios pueden confiar en que allí donde los usen, lo harán con el menor impacto ambiental posible, sin merma del rendimiento y la calidad.
